El ataque de «La Cosa»

La Cosa’ nunca fue mi superhéroe favorito, de hecho en muchas ocasiones me cuesta creer que sea realmente especial (más allá de los motivos obvios, sí). Por alguna razón, veo en él más a un ser perdido y en constante malhumor que a alguien inspirador, aunque tenga -por supuesto- sus momentos brillantes. Pero es que, además, ‘La Cosa’ se ha convertido desde hace unos días en una perfecta metáfora del esfuerzo y de los sacrificios que en ocasiones debemos hacer para superar nuestros miedos e inseguridades.

Porque, no nos engañemos, todos tenemos momentos en los que, sin razón aparente -o sí- nos sentimos profundamente atrapados en un mar de dudas. En algún instante nos asalta el temor al error, la profunda convicción de la incapacidad o la salvaje agresión de aquel “yo” oculto que, al hacerse presente, nos pone de nuevo contra las cuerdas recordándonos que, en algún ocasión, no hemos sido capaces de cumplir nuestros objetivos. Hasta hace unos días no me sentía capaz de identificar esos momentos, esas percepciones, esas sensaciones, pero ahora ya sé que son culpa de ‘La Cosa’.

"The Thing" (Crédito: Marvel)
«The Thing» (Crédito: Marvel)

Y el descubrimiento se lo debo a alguien cuyo nombre conservaré en el anonimato, aunque sí os puedo decir que es un alguien en quién confío y que creo que tiene talento y mucho por aportar. Precisamente eso era lo que más me sorprendió, que dudara de esas capacidades por más que unos y otros se las recordáramos. Y lo dijo: “no soy yo, es ‘La Cosa’…”. ¡Ah, ‘La Cosa’…! Fantástica metáfora, sensacional imagen. No puede evitar que ese monstruo duro y serio se apodere de su espíritu en ocasiones, y le susurre al oído que no, que no va a ser capaz de lograr todo aquello que se proponga, que tal vez no esté al nivel, que no hay una red debajo de esa cuerda que siente que está atravesando… Sí, esa ‘Cosa” es, nunca mejor dicho, un ‘bicho malo’.

Sé que resulta difícil luchar contra ‘La Cosa’. A ver quien es el guapo que le planta cara a ese tipo cuya mirada dejaría de piedra (sí, es humor un poco básico, pero ya me entendéis) al más pintado… a ver quien se atrevería sin más a girarse de espaldas a esa mole y esperar sencillamente a que se vaya, sin miedo a que, de repente, sin aviso, le pegue un último empujón hacia ese mar de dudas al que tanto le atrae enviarnos. Complicado, sí, pero no es imposible ni combatirla ni, mucho menos, vencerla. Aunque para eso sea necesario algo más que una simple mirada desafiadora, en ocasiones incluso es necesario algo más que valor, muchas veces la diferencia la marcan las personas que tenemos a nuestro alrededor.

Ya sé que ‘La Cosa’ puede parecer más grande y más fuerte. Ya lo sé. Como sé, también, que ‘La Cosa’ es un único ser, sea del tipo que sea, y que por más poderoso que parezca, no es invencible. Ni mucho menos. ‘La Cosa’, nuestra ‘Cosa’ es, en realidad débil, porque está creada a partir de nuestros miedos, de nuestras dudas y temores. Esa ‘Cosa’ no es nada más que una voz, maldita voz, que nos impide crecer, una voz que si escuchamos demasiado nos puede alejar de aquellos sueños, de aquellas metas, que en algún momento hemos ansiado conseguir. Por eso, lo que le comenté a la persona que me ha inspirado estas líneas hace unos días, y lo que comparto hoy en esta fusión,  es que ‘La Cosa’ se derrota pidiendo ayuda, escuchando, aprendiendo, sumando esfuerzos, dejando que el talento de los que nos rodean se impregne en nuestro propio ser, respirando, confiando en nuestras habilidades, aprendiendo de cada pequeño error y sacando el máximo provecho de cada éxito, pero sobretodo aportando ese valor que tenemos y que nos hace únicos y especiales a los que nos esperan al otro lado del muro.

Lo dije hace tiempo aquí mismo: todos tenemos arte (en el sentido más abstracto) dentro, todos somos de alguna forma animales creativos, aunque tal vez no lo hayamos descubierto, pero sobre todo, cada uno de nosotros está rodeado de Gigantes y de Vampiros. Cómo decidamos usar nuestro talento, y qué compañeros de viaje sean los que vayamos a elegir, será lo que definirá si ‘La Cosa’ se va haciendo cada vez más pequeña o, por contra, se acaba convirtiendo en nuestro enemigo más duro de vencer.

Yo elijo Talento, yo elijo Gigantes. ¿Y tú?

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s